domingo, 11 de octubre de 2009

Cómo es eñ desarrollo


Lo primero a tomar en cuenta es que cada uno de los integrantes del grupo analicen cómo están, cómo se encuentran en ese momento, esa es la base. Primero les digo que presten atención, les doy un momentito de tiempo para que se auto observen cómo están física, emocional y psicológicamente. Normalmente pongo una música clásica muy suave para que las personas puedan, en esos aproximadamente 15 minutos, aguzar los sentidos. A partir de esa observación se presentan, dicen su nombre y comentan cómo están. Esto es muy importante porque ellos mismos, a partir de esa observación, identifican y ya colocan en palabras sus problemáticas. Les digo que observen si hay alguna zona en la que la energía está bloqueada, rígida, dura, entonces habitualmente dicen: “siento la cabeza dura, o el cuello lo siento totalmente rígido, siento el plexo así, o la pelvis”. Ese es un reconocimiento muy importante que las personas hacen por sí solas.
Lo segundo a trabajar es siempre el enraizamiento, principalmente yo por la formación que tengo en bioenergética, comienzo con ejercicios, de pie, para comenzar a sentir dónde estamos, si estamos realmente plantados en la tierra.




De esto las personas se dan cuenta a partir de la práctica, del contacto con la planta de los pies. Les hago hacer determinado tipo de ejercicios, para trabajar el enraizamiento, con fuerza en el piso, levantarse, pararse.

También lo trabajo posteriormente, en la evolución del tiempo de los seminarios, con meditación en healing, que trabaja desde lo físico y lo espiritual, el enraizamiento en los centros de energía.
Si es un seminario de todo el día hacemos 2 horas de ejercicios en profundidad, cuando el encuentro es de 3 horas, practicamos 1 hora de ejercicios, y después realizamos meditaciones de Osho, que son dinámicas.
Osho ha creado un sistema de meditación en movimiento para liberar los bloqueos energéticos del cuerpo. Los bloqueos hacen que la persona esté contraída, temerosa, que no esté plena en la vida, que no esté alineada, que esté con poca vitalidad.
Desde la mirada de la bioenergética si la columna está colapsada, por ejemplo, si no hay una raíz desde la planta de los pies enraizada al piso, los bloqueos muscular y esquelético hacen que el cuerpo esté encorazado, no hay alineamiento. No estar alineado, es no estar presente, y eso es lo que produce luego enfermedades mentales y físicas
Por otro lado practicar ejercicios de concientización de la respiración es fundamental para que la persona esté bien. Todos tenemos esa posibilidad al alcance de la mano.
Lo interesante es comprobar cómo los participantes aprenden a conocer los centros de energía, a diagnosticarse a sí mismos, cuando sienten que un centro de energía está bloqueado, cómo pueden hacer para abrirlo.
Cuando terminamos la jornada, ya sea de fin de semana o de 3 horas, al final vuelvo a hacer esto de que cierren los ojos, con la música y los voy guiando, hacia una auto-observación del cuerpo, de la energía, de lo emocional, para que vean qué es lo que cambió, y que esto les sirva para modificar hábitos y conductas, tanto desde el aspecto físico como desde el psicológico-emocional.
Las preguntas son: ¿les sirvió? ¿para qué les sirvió? ¿de qué es de lo que se dieron cuenta? ¿qué es lo que cambió? ¿qué es lo que está mejor? ¿qué es lo que sienten que pueden cambiar y de qué manera?
Siempre lo que intento es que se lleven una herramienta, aun en los seminarios cortitos de dos o tres horas, para seguir trabajando en la semana o en los quince días, al mes, o cuando nos volvamos a encontrar. Siempre les dejo una herramienta. Primero que se observen, segundo que hagan determinados ejercicios o determinadas meditaciones. A algunos, de acuerdo a la problemática de lo que pude notar en el transcurso del trabajo, les puedo indicar algo especial, sea ejercicio o meditación, acorde a la situación particular, para otros doy una meditación general, o un ejercicio general para todos, después ya voy personalmente a cada uno y le indico qué cosa tendría que trabajar para solucionar su dificultad.
Lo importante es que las personas, con mi modelo de trabajo, se llevan algo, no se van vacías. En primera instancia se llevan un darse cuenta de dónde está la problemática, con qué está ligada, qué es lo que hacen para terminar el día con el cuerpo cansado, con poca energía, qué es lo que hacen para bloquear el plexo, la garganta, o la pelvis, y en segunda instancia que tomen conciencia de que además tienen la posibilidad de modificar esa situación. Para mí esto es fundamental, que la persona sepa que tiene una manera de modificar o de cambiar esa estructura, que tomen conciencia de la responsabilidad que cada uno tiene sobre la curación de su propio cuerpo. Todos tenemos la capacidad para desarrollar nuestro propio terapeuta interno para no seguir con la dependencia del terapeuta de por vida.
Toda persona tiene la capacidad de autocurarse, de autoalinearse, de poder estar centrada. En los seminarios o los talleres, cortos o largos, es fundamental ese criterio. Esto tiene un porqué, es para descubrir el potencial propio que está dormido. Somos poderosos, tenemos un enorme potencial interno dormido.
 

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